Algunos consejos útiles para los que viajan solos
Nunca se sentirá más libre que cuando viaja solo. ¿Quiere quedarse durante cinco horas en esa pequeña librería que encontró en un callejón de Buenos Aires? ¡Adelante! ¿Tiene ganas de pasear en metro durante un día entero para dejarse encantar por los habitantes de Londres? ¡Hágalo! Hay pocos medios de transporte tan acogedores como el de la capital inglesa. ¿Le gustaría atreverse a probar el pez globo en Japón? ¡Arriésguese! ¿Le vendrían bien unas 12 horas de sueño después del su caminata por la selva del Amazonas? ¡Duerma! Nadie le va a decir que está perdiendo el tiempo. Aunque para muchos resulta intimidante y aburridor viajar sin compañía, hay que probarlo, al menos una vez. Es muy posible que se convierta en la mejor aventura de su vida. No solo porque podrá hacer exactamente lo que le gustaría hacer y conocerá un montón de gente fascinante en el camino, sino porque se encontrará con su otro yo. Ese que no conocía y que es mucho más valiente, recursivo y seguro de sí mismo. Ese que no se estanca, que supera la timidez para no perderse de nada, que se ubica en el espacio como si se hubiera tragado una brújula. Ese que se sacude la pereza y la comodidad, y anda con la mente despierta, porque cada paso puede conducir a una sorpresa. Lo invitamos a que empaque maleta y se embarque en una travesía en solitario. Para que saque el mayor provecho de la experiencia hemos hablado con dos viajeros empedernidos –Daniel Tirado (Viajandosinpapelhigienico.com) y Chris Bell (Colombiatravelblog.com)– para descubrir sus secretos y compartirlos con ustedes. A continuación reunimos algunas recomendaciones que pueden ser útiles para aquellos que se atrevan a viajar sin compañía.
- Sea precavido. Reserve las primeras noches de su estadía, llegue de día y haga lo posible por borrar la pinta de turista: empaque ligero, vístase como un local y revise el mapa dentro de un restaurante, no en medio de la calle.
- No olvide que es humano. Lleve con usted medicamentos que puedan ser útiles: analgésicos, antiinflamatorios y antihistamínicos. Piense en curas y agua oxigenada. Incluso, en anticonceptivos. Además, antes de arrancar, asegúrese de ir acompañado de un seguro de viajes. Muchas tarjetas de crédito lo ofrecen gratis, pero averigüe cuáles son sus condiciones. Es muy probable que le exijan haber pagado los tiquetes o la estadía con la tarjeta.
- Piense a lo colombiano. Esconda la plata y el pasaporte en lugares diferentes e inesperados. Las medias son una buena opción o la bolsa donde guarda las toallas higiénicas –despiertan tanto pudor que nadie se atreverá a acercarse–. Además, haga copias de sus documentos y envíelas a su correo electrónico.
- Lleve un diario. Estudios han demostrado que los viajeros son más felices cuando planean y recuerdan la travesía que cuando la viven. La expectativa y la nostalgia son más poderosas que la experiencia en sí misma. Así que vale la pena escribirlo todo, ya que no tiene con quien conversarlo.
- Tenga en mente la película 127 horas (sobre un hombre que se accidentó, su antebrazo quedó aprisionado por una roca y tuvo que recurrir a las más brutales alternativas para sobrevivir porque nadie conocía su paradero). Si sale, deje una nota que explique con quién, a dónde y a qué hora tiene pensado volver. Acuerde con un amigo o un familiar mandarle un mensaje al día.
- Sea aventurero. Llegará transformado y dichoso si se atreve a salirse de su zona de confort. Se sorprenderá de lo que es capaz de hacer cuando nadie lo ve.
- Recuerde que los ángeles de la guarda también piden vacaciones. Estar solo requiere estar más atento. En un bar, hay que observar más y tomar menos. Procure regresar en taxi y pídalo. En Google Maps puede guardar la ubicación del lugar donde se hospeda para revisar que el conductor va por el camino correcto.
Para los que quieren conocer gente
Quédese en un hostal o alquile un sofá. Quien viaja solo es inofensivo y accesible, así que seguro conseguirá compañía. Tenga en cuenta que si viaja con Couchsurfing o Airbnb, debe buscar lugares con muchas y excelentes recomendaciones.
Coma en compañía. Es una tendencia que han llamado mealsurfing y consiste en ir a lugares donde ofrecen mesas comunales para aquellas personas interesadas en socializar. Escriba ‘mesa comunal’ en Internet y aparecerán diferentes opciones y ciudades.
Busque gente con sus mismos intereses. MeetUp, Badoo y TripAdvisor le ayudarán a encontrarla. Y siempre está la posibilidad de retomar Tinder.
Para los más paranoicos
Viaje con anillo de matrimonio (así no esté casado). Algunos viajeros (así como el Departamento de Estado de Estados Unidos) aseguran que esta estrategia reduce los riesgos para las mujeres.
Tenga a la mano algún mecanismo de defensa. Un spray pimienta, un silbato o un llavero de gato tal vez le sirvan para sentirse más seguro.
Lleve con usted la bolsa de un supermercado de la ciudad. Guarde allí los mapas y la cámara. Se camuflará entre los locales y pasará desapercibido para ladrones que buscan maletas grandes.
Deje el aviso de “No molestar” en la puerta del cuarto. Confundirá a aquellos que pretenden aprovechar su ausencia para robarlo.