Con el retiro de EEUU , posible resurgimiento de grupos yihadistas
Según analistas, la ofensiva turca en Siria podría provocar fuga de terroristas del Estado Islámico. Su destino, que puede verse muy alterado por la ofensiva turca en curso en Siria, preocupa al mundo entero: los yihadistas extranjeros capturados y actualmente prisioneros de las fuerzas kurdas podrían aprovechar el caos para evadirse. Las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), integradas en la principal milicia kurda de Siria, las Unidades de Protección del Pueblo (YPG), «advirtieron que si Turquía penetra en Siria, tendrán que dedicar todas sus fuerzas para repeler su ataque», explica a la AFP Sam Heller, analista del International Crisis Group (ICG). «Mantienen miles de prisioneros del grupo Estado Islámico (EI), en muchos casos en cárceles improvisadas», añade. «Si ciertos combatientes del EI aprovechan el caos para fugarse, podrían realizar operaciones en la región. Y si logran huir del campo de batalla sirio, podrían reforzar a grupos islamistas radicales en el resto del mundo», advierte. La administración semiautónoma kurda del norte de Siria afirmó este jueves que los bombardeos turcos habían impactado en «una parte de la prisión de Jarkin, en Qamichli (en el noreste de Siria), donde se encuentran muchos terroristas del EI (…) peligrosos criminales originarios de 60 países». En previsión de la ofensiva turca, anunciada con varios días de antelación, el ejército estadounidense ha trasladado «a un lugar seguro» al menos a dos importantes miembros del EI, reveló este jueves el presidente Donald Trump.
Si ciertos combatientes del EI aprovechan el caos para fugarse, podrían realizar operaciones en la región. Según el Center on National Security de la universidad neoyorquina de Fordham, quien cita a altos funcionarios estadounidenses, serían «varias docenas» de miembros del EI capturados por las FDS que han sido preventivamente puestos a resguardo por el ejército estadounidense, probablemente en Irak.
Por el momento, los responsables kurdos de Siria afirman que, pese a las circunstancias, no tienen la intención de abrir las puertas de sus cárceles. «Sobre los yihadistas (extranjeros), nuestra cooperación (con Francia) prosigue, aunque en condiciones difíciles. Mantenemos con fuerza y rigor nuestra cooperación», asegura a la AFP su representante en Francia, Khaled Issa.»Intentaremos hacer verdadero malabarismo en varios frentes con los medios de los cuales disponemos», señala. «Estamos obligados a retirar una parte (de nuestros hombres), incluso del valle del Éufrates, donde eventualmente el régimen y sus aliados podrían avanzar. Esta operación (turca) tendrá un impacto muy negativo sobre nuestro combate contra las células durmientes del EI, que realizamos cotidianamente».
‘Volver a casa’
Para el presidente Trump, las cosas son simples y su causa comprendida. ¿Qué va a ocurrir? «Bueno, se escaparán hacia Europa», lanzó el miércoles de noche, respondiendo a la pregunta de un periodista. «Es allí adonde quieren ir. Quieren volver a casa, pero han pasado meses desde que Europa ya no quiere recibirlos», se lamentó. «Habríamos podido entregarlos, podrían haber sido juzgados, y ellos (los europeos) podrían haber hecho lo que quisieran…», añadió.
Alain Rodier, exmiembro del DGSE (servicios exteriores franceses) y director de investigación en el Centro de Inteligencia francés (CF2R), no considera esta hipótesis la más probable. «Hasta ahora, parece ser que los yihadistas, en particular los franceses y europeos, no regresan a Europa», indicó a la AFP. «Saben que la mayoría de ellos están identificados, que los servicios de seguridad tienen sus nombres, fotos, y en muchos casos sus huellas digitales, por lo que existe para ellos el riesgo de ser interceptados en las fronteras. «Si usted sale de un campo de prisioneros, no es para entrar en prisión en otra parte», continuó. «Parece que algunos habrían elegido el Extremo Oriente, donde no son conocidos, otros podrían elegir el Sahel (región del oeste de África con gran presencia de grupos yihadistas)», añadió.
La hipótesis de una fuga de ciertos islamistas radicales hacia otros territorios de yihad había sido tratada a fines de septiembre, antes de la nueva ofensiva turca, por el coordinador nacional de inteligencia francés, Pierre Bousquet de Florian. Éste había precisado que unos cuarenta yihadistas franceses habían conseguido abandonar la provincia de Idlib, en el norte de Siria, para adherirse a otras células del EI en el sudeste asiático, Afganistán y la región del Sahel.