COVID 19 Y LA POLÍTICA SUDAMERICANA.

Usted definitivamente tiene un país de referencia ,es decir de procedencia ,vale decir donde nació de manera generacional o accidental por lo tanto piensa  y siente sobre él  ,o lo ama u odia ,por así  decirlo algunas veces lo defiende y otras reniega de él ,de su gente, es decir sus pobladores o de sus políticos ,en el presente hablare sobre algunos políticos sudamericanos y sus incoherencias frente al tema de la pandemia COVID-19 para lo cual no están preparados y empezaré de manera alfabética para no herir susceptibilidades y/o sensibilidades .

En Argentina Alberto Fernández su presidente fue uno de los primeros en promover  la cuarentena un 19 de Marzo ese mismo día un grupo de vecinos en Neuquén decidió festejar un cumpleaños con un asado y celebraron compartiendo cerveza o vino de la misma botella, unos días después el cumpleañero estaba muerto.

En Bolivia el gobierno de Jeanine Anez intensifico su campaña de acusaciones y persecución política a la oposición, con el fin de ocultar la carencia de elementos de protección del personal de salud, que inclusive tiene que comprárselo, ya que el país solicita millones en créditos internacionales por que hay una descapitalización del país y desempleo debido a la paralización económica del país por causa del virus.

En Brasil liderado por Jair Bolsonaro se realizó un cumplimiento irregular del aislamiento social y en algunos lugares prácticamente no existió y comenzó a relajarse en el momento más crucial ,no hubo restricciones de las personas durante las fechas festivas ,Semana Santa y vacaciones ,Jair ignoro las reglas de distanciamiento social ,participando ,alentando e incluso causando aglomeraciones ; la minimizo llamándola «gripezinha» un 24 de marzo ; un 29 de marzo ingreso a una farmacia y una panadería tomándose fotos ,un 9 y 10 de Abril en una multitud de personas se abrazo ,beso y estrecho las manos con sus partidarios políticos ,no uso mascaras ,un 19 de abril participo y habló en una manifestación de cierre del congreso , cuando pasaron los 5,000 muertos ante una pregunta periodística sobre ello dijo : Que quieres que haga ?,manifestando un constante desacuerdo con autoridades como gobernadores y alcaldes ,destituyo al Ministro de Salud un 16 de abril en medio de la pandemia ,abuso de las noticias falsas como que las unidades de cuidados intensivos estaban vacías o que  las funerarias no tenían muertos y de promesas de curas milagrosas como la hidroxicloroquina,es por ello que  ocupa el primer lugar de muertos en Sudamérica .

En Colombia el gobierno de Duque presento fallas en la toma de pruebas y sus resultados no procesados por incumplimiento de los protocolos estándares, hubo falta de rigor en el asilamiento social, las sospechas de casos en las cárceles y en el Amazonas están presentes.

En chile la nación que preside Sebastián Piñeira las medidas fueron inacertadas deficientes y tardías, hicieron caso omiso a las recomendaciones de adoptar restricciones más severas a la circulación, no se mostró intención de aislar mejor a la población llegando a decir la subsecretaria de salud publica que una cuarentena total era «impracticable » siendo poco claros en la toma de decisiones y al momento de difundir las cifras.

En Ecuador presidida por Lenin Moreno hubo una tardía reacción  en guayaquil, por Internet se vieron cadáveres en las calles o en viviendas envueltos en plásticos producto de  un sistema hospitalario desfinanciado,largas filas de vehículos con ataúdes de cartón ,hasta hoy las familias buscan a sus fallecidos y hay errores en la identificación de cadáveres, falta de provisión de insumos médicos , un verdadero caos en el manejo de la pandemia .La alcaldesa Cynthia Viteri también contagiada dijo a la prensa aquí «todos » son culpables, los ciudadanos no respetaron la cuarentena además de una debilidad informativa .

En Paraguay en el gobierno de Mario Abdo Benítez, si bien es cierto hay medidas coercitivas es más importante  la conciencia o el convencimiento ciudadano se aplico la seriedad en la cuarentena parcial y después total, restricciones de la circulación terrestre, cierre de las fronteras y del aeropuerto internacional, sé duplicaron las camas de terapia intensiva, se construyeron hospitales modulares, se postergo el pago de servicios básicos, como luz agua y teléfono, se dio kits alimenticios para zonas vulnerables del país, y se estableció un control en los supermercados.

El gobierno de Martín Vizcarra en Perú reacciono rápido declarando la emergencia sanitaria, restricciones a las reuniones de mas de 300 personas y el aislamiento domiciliario ,inclusive antes que la Organización Mundial de la Salud declarara al COVID -19 como una pandemia, ordeno la cuarentena general y el cierre de fronteras ,pero hoy en Sudamérica ocupa el segundo lugar de muertos ;la problemática es que la salud publica no ha escapado a la burocracia administrativa y a la corrupción histórica que también toco al sector salud ,con escasas camas para las Unidades de Cuidados Intensivos, con escasos equipamentos de atención, lo que lleva a atender a los pacientes en sillas al aire libre o no los reciben ,con escasos recursos humanos vale decir doctores infectados o muertos y el área  rural y amazónica abandonadas en infraestructura y equipamiento con una precariedad estructural.

El gobierno de Luís Lacalle Pou del Uruguay apelo a una consulta temprana, una aplicación móvil que guía a la persona sobre la enfermedad y lo pone en contacto con centros de salud, la atención primaria a domicilio para evitar el desplazamiento a hospitales normas definidas para el personal de salud,se duplico la aplicación de vacunas antigripales ,se recomendó el uso de mascarillas y a la responsabilidad de la población a diferencia de los demás países, sólo recomendó  a las personas evitar salir a la calle, hoy tiene una enorme preocupación por la relajación de la  cuarentena ,por una creciente circulación de personas lo que es contrario a las líneas de política propuestas por el gobierno.

En el pintoresco Venezuela de Nicolás Maduro quien habla con los pajaritos las dudas sobre las cifras oficiales de contagiados y muertos son razonables pueden ser inventadas o manipuladas ya que el gobierno controla la información total.

En síntesis una suma de errores y aciertos, confusión casi total sobre algo para que casi ningún organismo estaba preparado queriendo dar la impresión que todo esta bien, sin cumplir criterios normativos que se estipulan, muchas posturas que se han encargado de obstaculizar el trabajo de la prensa y las informaciones veraces del sector salud sobre una realidad discutible, controversial e inusual el COVID-19.

A mi manera.

 

Juan Carlos Valderrama.