Demócrata latino de Texas explica por qué apoyo leyes anti migrantes
El representante Henry Cuellar fue uno de los tres demócratas que apoyaron la medida “No Santuario para Criminales” y uno de los 24 demócratas que votaron a favor de la Ley de Kate. El congresista Henry Cuellar de Texas fue uno de los pocos demócratas que apoyaron este jueves dos medidas migratorias aprobadas en la Cámara de Representantes, una para aumentar las penas a deportados que regresen a Estados Unidos y otra para sancionar a las ciudades santuario. Cuellar no fue el único demócrata en apoyar ambas propuestas, impulsadas por republicanos y descritas por el presidente Donald Trump como «propuestas con las que hice campaña». Al menos tres demócratas votaron a favor de la medida HR3003, conocida como ‘No Santuario para Criminales’, y 24 demócratas votaron a favor de la HR3004, o la Ley de Kate. «Siempre voto basado en mi conciencia y en las necesidades de mi distrito, no en la afiliación partidista», explicó el congresista ante una pregunta de Univision Noticias. «Miro los detalles de cada medida, no solo lo que se reporta en las noticias o lo que se comparte en redes sociales». La HR3003 busca aumentar la cooperación local con las deportaciones. Haría a las ciudades santuario inelegibles para ciertos fondos de justicia y seguridad si no cumplen con solicitudes federales de detención de inmigrantes. También prohíbe políticas locales que limiten la cooperación con el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE). Por otro lado, la HR3004 aumentaría las condenas para los indocumentados que ingresan sin autorización al país luego de ser deportados. Establece que cualquier deportado que regrese a Estados Unidos puede ser encarcelado por hasta dos años, una pena máxima que se eleva hasta 25 años dependiendo de su historial criminal. Para el congresista Cuellar, se trata de medidas sensibles que modifican la manera en que funciona el sistema de justicia del país. «Cuando lees la legislación, verás que se trata de ajustes razonables a la ley actual que reflejan mis valores: la supremacía de la ley, la comunicación eficiente entre distintos niveles de gobierno y la discreción judicial de asignar sentencias basadas en los detalles de un caso en lugar de tener mínimos mandatorios (de obligatorio cumplimiento)», explicó. Opinó además que no se trata de un tema migratorio. «Estas fueron medidas de cumplimiento de la ley, no de inmigración», apuntó.
El único demócrata hispano
Cuellar, quien es miembro del Caucus Congresional Hispano (CHC), fue el único miembro de ese grupo en apoyar las medidas. Sus compañeros habían organizado una rueda de prensa el jueves en la mañana para denunciar ambas propuestas. «Queremos que se arreste a los criminales y que completen sus condenas y que regresen al lugar del que vinieron», aseguró en la conferencia el representante Adriano Espaillat, quien vivió como indocumentado cuando era joven. «Pero, ¿qué sucede con los millones de inmigrantes que son meseros y lavan platos? ¿Qué sucede con los millones de indocumentados que cuidan a nuestros hijos? ¿Qué sucede con los que cuidan a nuestros padres y abuelos ancianos?» Los miembros del CHC afirmaron en esa rueda de prensa que se trataba de medidas que impactarían negativamente a inmigrantes, con o sin papeles. «Estas medidas no son solo antiinmigrantes y antiindocumentados; realmente son antiestadounidenses», aseguró el representante Tony Cárdenas de California. «Son mentiras sobre quiénes somos como país».