Juez determina que el pan de Subway no es pan

El tribunal supremo de Irlanda sentencia que el pan de Subway legalmente no es pan El pan del Subway no es pan, al menos no es legalmente pan según la ley Irlandesa. Esa ha sido la sentencia final del tribunal supremo del pís a un caso que comenzó cuando una compañía llamada Bookfinders quiso librarse de pagar un buen montón de impuestos. Bookfinders es la compañía franquiciada que ostenta los derechos de comercialización de los Subway en Irlanda. En 2006, la empresa solicitó la devolución de una parte del IVA que pagaba por sus productos alegando que el pan de sus bocadillos es un producto esencial, y que por tanto no debería estar sujeto a pagar el 13,5% de IVA como ocurre con otros bienes no esenciales. La ley que regula el IVA en Irlanda se remonta a 1972 y está llena de matices y casos específicos que hace que, por ejemplo, la comida servida en restaurantes solo pague IVA si se consume dentro del local. La comisión de la hacienda irlandesa que llevaba el caso denegó la petición, pero Bookfinders apeló y la demanda terminó, años después, en el tribunal supremo del país. La decisión de los jueces de esta corte es definitiva y una cierta bofetada para la compañía. El pan de Subway debe pagar impuestos porque… no es pan, sino bollería

El verdadero origen del kebab (y por qué eso que has comido anoche probablemente no sea auténtico ke…

Carne marinada, lechuga, tomate, una salsa blanca y otra roja, todo ello rebosando desde una torta… En un complejo documento de 51 páginas, la sentencia explica que el pan de la popular compañía de comida rápida tiene un contenido de azúcar del 10% del peso total de la harina. Para que un alimento se considere pan bajo la ley fiscal irlandesa, el contenido de azúcar no debe superar el 2% del de harina. A partir de ahí el alimento se considera confectionary, o sea, confitería. No hay devolución de impuestos para Bookfinders. Lo cierto es que aunque en Europa se supone que el pan tradicional no lleva azúcar, cada vez hay más compañías que abusan del azúcar y de muchos otros aditivos para dotar al pan de un sabor más agradable. También se añaden en exceso otros productos como la levadura o la sal. En Estados Unidos, donde el porcentaje de azúcar no está estrictamente regulado hay marcas de pan de molde que contienen el equivalente a cuatro gramos de azúcar en una sola rebanada. [Tribunal Supremo de Irlanda vía Independent]