La apnea del sueño después de un accidente cerebrovascular
Los sobrevivientes de accidentes cerebrovasculares, en especial los mexicanos estadounidenses, cuyo sueño es interrumpido por pausas en la respiración (apnea del sueño) tienen más probabilidades de fallecer o de experimentar otro accidente cerebrovascular, de acuerdo con una investigación preliminar presentada en la Conferencia Internacional sobre Accidentes Cerebrovasculares 2018 de la American Stroke Association, un encuentro mundial principal dedicado a la ciencia y el tratamiento de las enfermedades cerebrovasculares para investigadores y médicos clínicos.
Hasta que se realizó este análisis de Vigilancia del ataque cerebral en Corpus Christi, no había datos prospectivos sobre la relación entre la apnea del sueño y los accidentes cerebrovasculares recurrentes o la muerte provenientes de poblaciones grandes y basados en la población o la diversidad étnica. El proyecto inscribió a 842 personas (65 de mediana edad, 47 por ciento mujeres, 58 por ciento mexicanos estadounidenses, 34 por ciento blancos no hispanos) que tuvieron un accidente cerebrovascular isquémico causado por una reducción en el suministro sanguíneo entre 2010 y 2015.
Mediante el uso de dispositivos portátiles para el control de la apnea del sueño, descubrieron que los participantes tenían una mediana de 14 pausas (completas o parciales) en la respiración por hora durante el sueño, el 63 por ciento de las cuales se identificaron con la apnea del sueño (10 o más pausas en la respiración por hora).
Durante el seguimiento (tiempo mediano hasta el evento de 584 días) los investigadores descubrieron lo siguiente:
- El 10,7 por ciento experimentó otro accidente cerebrovascular y el 14,8 por ciento falleció.
- Cada pausa adicional en la respiración por hora se asoció con un aumento del 9 por ciento en las probabilidades de sufrir un accidente cerebrovascular recurrente o la muerte.
- Después de realizar el ajuste correspondiente a los factores de riesgo conocidos, el origen étnico mexicano estadounidense se asoció con un aumento de 1,7 veces en las probabilidades de sufrir un accidente cerebrovascular recurrente o la muerte.
La apnea del sueño puede ser un factor de riesgo modificable importante en lo que respecta a los resultados deficientes del accidente cerebrovascular en general, y abordar la afección puede ayudar a reducir las disparidades de salud relacionadas con el accidente cerebrovascular en los mexicanos estadounidenses, afirman los investigadores.