Las razones de Joe Biden para sancionar a Rusia por ciberespionaje

 

Biden impone nuevas sanciones a Moscú y expulsa 10 diplomáticos rusos por interferir en las elecciones y ataques cibernéticos

En represalia contra la interferencia en las elecciones estadounidenses, ciberataques, desinformación, ataque a periodistas, su posición en Crimea, y otras acciones desestabilizadoras, la administración Biden ha impuesto nuevas sanciones financieras a Rusia y ha sancionado a 32 entidades e individuos. 10 diplomáticos rusos fueron expulsados. Estados Unidos ha anunciado este jueves que impondrá nuevas sanciones contra Rusia en represalia por los ciberataques, la interferencia en las elecciones y otras operaciones desestabilizadoras por parte de ese país.

«Fui claro con el presidente Putin de que pude haber ido más lejos, pero decidí no hacerlo», dijo el presidente Joe Biden durante un mensaje que pronunció la tarde de este jueves en la Casa Blanca. «Decidí ser proporcional. Estados Unidos no está buscando escalar un conflicto con Rusia. Queremos una relación estable y predecible».Pero Biden admitió que si Rusia continúa interfiriendo con la democracia estadounidense, «estoy dispuesto a adoptar más acciones en respuesta». Biden habló horas después de que la Casa Blanca anunciara en un comunicado que el mandatario firmó una nueva orden ejecutiva de sanciones que «proporciona autoridad fortalecida para demostrar la determinación de la Administración para responder y disuadir el alcance total de las actividades extranjeras dañinas de Rusia». «Esto incluye, en particular, los esfuerzos para socavar la conducción de elecciones democráticas libres y justas y las instituciones democráticas en Estados Unidos y sus aliados y socios; participar y facilitar actividades cibernéticas maliciosas contra Estados Unidos y sus aliados y socios; fomentar y utilizar la corrupción transnacional para influir en gobiernos extranjeros; llevar a cabo actividades extraterritoriales dirigidas a disidentes o periodistas; socavar la seguridad en países y regiones importantes para la seguridad nacional de Estados Unidos; y violar principios bien establecidos del derecho internacional, incluido el respeto por la integridad territorial de los estados», explica el documento. Como parte de esta medida, a través del Departamento del Tesoro la administración impedirá que las instituciones financieras estadounidenses compren bonos emitidos después del 14 de junio de 2021 por el Banco Central de la Federación de Rusia, el Fondo Nacional de Riqueza de la Federación de Rusia o el Ministerio de Finanzas de la Federación de Rusia, y de prestar fondos a estas instituciones. Además, la directiva otorga autoridad al gobierno estadounidense para ampliar las sanciones a la deuda soberana rusa, precisó la Casa Blanca. «El Tesoro sancionó a 32 entidades e individuos que llevaban a cabo intentos dirigidos por el gobierno ruso de influir en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2020 y otros actos de desinformación e interferencia», informó la Casa Blanca. «El Tesoro se centrará en los líderes, funcionarios, servicios de inteligencia y sus representantes rusos que intenten interferir en el proceso electoral de Estados Unidos o subvertir la democracia estadounidense», dijo la secretaria Janet Yellen en el anuncio. «Este es el comienzo de una nueva campaña estadounidense contra el comportamiento maligno de Rusia». En asociación con la Unión Europea, Reino Unido, Australia y Canadá, EEUU el Tesoro estadounidense sancionó también a ocho personas y entidades asociadas con la actual ocupación y represión de Rusia en Crimea. » Además, EEUU ha expulsado a 10 miembros del cuerpo diplomático ruso en Washington DC, entre ellos representantes de servicios de inteligencia rusos. La administración Biden también está sancionando a seis empresas de tecnología rusas que, según el gobierno federal, brindan apoyo a las operaciones de inteligencia de ese país.

Apoyo a las sanciones

Tras conocerse la noticia, La Unión Europea dijo que se solidarizaba con EEUU por las acciones de Rusia. También lo hizo la OTAN. «Los aliados de la OTAN apoyan y se solidarizan con Estados Unidos, tras el anuncio del 15 de abril de acciones para responder a las actividades desestabilizadoras de Rusia», anunció la organización en un comunicado.

La respuesta de Rusia

Maria Zakharova, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de RUsia, dijo este jueves en conferencia de prensa que una respuesta de Rusia a las sanciones estadounienses ería «inevitable» y que el ministerio había co La nueva administración demócrata de Joe Biden anunció este jueves un conjunto de sanciones contra Rusia, entre ellas las primeras de corte económico en más de cinco años, como retaliación por haber intervenido en la campaña del 2020 y el espionaje detectado a finales del año pasado contra nueve agencias federales y cien empresas a través de un software que se autoinstaló en sus sistemas informáticos.  Las sanciones, en primer lugar, prohíben a los bancos de Estados Unidos comprar bonos del Banco Central de Rusia y otras entidades oficiales en este paíslo cual afectará la capacidad de Moscú de buscar fondos en el mercado internacional de capitales a partir de junio de este año. Así mismo, serán expulsados del país 10 funcionarios rusos que han sido catalogados de espías y hacen parte de la delegación de Rusia en el país y se sancionará con el bloque económico a por lo menos seis compañías rusas que participaron en la operación hackeo.

Biden habló personalmente con el presidente Vladimir Putin esta semana para anticipar la nueva ronda de sanciones y le dijo al líder ruso que Estados Unidos «actuará con firmeza» en defensa de sus intereses nacionales. Ya Moscú advirtió que son ilegales y que tomará represalias equivalentes contra Estados Unidos. Desde que llegó a la Casa Blanca, el presidente demócrata había anunciado que las acciones de Rusia tendrían serias consecuencias. Se trata de un giro de 180 grados de los años de Donald Trump en la Casa Blanca, cuando el republicano optó en muchas ocasiones por ignorar las provocaciones del Kremlin. La decisión de Biden se concretó tras un informe de la comunidad de inteligencia en el que concluyen que Rusia metió las manos en la pasada campaña electoral para favorecer a Trump como lo hizo durante las elecciones del 2016.
Las sanciones, sin embargo,  no son lo suficientemente fuertes como para afectar el desempeño económico de Rusia o provocar el rompimiento de las relaciones diplomáticas. De hecho, Biden mismo le sugirió a Putin realizar una cumbre para discutir los temas que los separan. Encajan, más bien, en un retorno a la normalidad en las relaciones bilaterales donde EE. UU. usa las herramientas a su disposición para elevar el costo de las maniobras de Rusia. Como las que empleó Barack Obama tras la invasión de Crimea en 2014 y por su apoyo a los separatistas en Ucrania. «Nuestra visión es que no hay una acción que por sí sola pueda alterar el comportamiento maligno de Rusia. Pero les estamos enviando un mensaje de que hay costos, habrá más presión y la mesa está abierta en caso de que quieran sentarse a conversar», dijo Jonathan Finer, uno de los asesores de Seguridad Nacional de Biden. De acuerdo con Edward Fishman, especialista en Rusia de Atlantic Council, «Las acciones también demuestran que esta nueva administración no piensa mirar hacia otro lado y le están informando a los mercados internacionales que más viene en camino si Rusia no altera su actitud agresiva. Y eso es relevante por que muchos de estos mercados operan a futuro«.
Es, además, una advertencia a Moscú de que una nueva invasión a Ucrania y otras maniobras en el tablero internacional también sería motivo para imponer severas sanciones políticas y económicas.

Las pruebas del ciberataque

Según un informe no clasificado de la inteligencia de EE. UU., Putin autorizó campañas de influencia destinadas a dañar la candidatura del presidente Biden durante las elecciones de 2020 e impulsar al expresidente Donald Trump, asegura la CBS. «Un elemento clave de la estrategia de Moscú en este ciclo electoral fue el uso de representantes vinculados a la inteligencia rusa para impulsar narrativas de influencia, incluidas acusaciones engañosas o infundadas contra el presidente Biden«, según un informe desclasificado difundido por la Oficina del Director de Inteligencia Nacional. El año pasado, los investigadores de ciberseguridad identificaron un pirateo de un software llamado SolarWinds, una intrusión que dio a los ciberdelincuentes acceso a 18.000 redes informáticas gubernamentales y privadas. La inteligencia de Estado Unidos ha identificado a los piratas informáticos en Rusia como responsables del ataque, los cuales obtuvieron acceso a archivos digitales de varias agencias gubernamentales estadounidenses, incluidos los Departamentos del Tesoro, Justicia y Estado.

¿Qué dice Rusia?

El Kremlin juzgó este jueves que las nuevas sanciones estadounidenses contra Rusia no van a favorecer la organización de la cumbre Biden-Putin propuesta por la Casa Blanca.

«Lo que se está discutiendo actualmente no va a favorecer de ningún modo tal reunión«, estimó el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, añadiendo que es cuestión «de los dos presidentes si esto la impedirá o no». «Condenamos cualquier iniciativa de sanciones, las consideramos ilegales», agregó. Desde enero, y con la llegada a la Casa Blanca del nuevo presidente, las relaciones entre Moscú y Washington, que ya eran tensas, se han deteriorado aún más y muy rápido. Justamente, este jueves Rusia citó al embajador de Estados Unidos, John Sullivan, en respuesta a las sanciones. La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, adelantó que la conversación con el embajador «no será del agrado de la parte estadounidense». «Dicho comportamiento agresivo recibirá, sin lugar a dudas, una respuesta firme. La respuesta contra las sanciones será inevitable», afirmó. Zajárova subrayó que «en Washington deben asumir que habrá que pagar por la degradación de las relaciones bilaterales«.  Rusia, a la que ya se le aplicaron nuevas sanciones durante este año, ha sido reprobada por encarcelar al principal opositor del país, Alexéi Navalni y, de acuerdo con Washington, ha sido sorprendida in fraganti en múltiples casos de piratería