No se ha podido acabar con el tráfico de marfil
Se calcula que la población de elefante africano se ha reducido en cerca de un 58 % en los últimos 40 años, ya que un promedio de 33.000 elefantes al año son víctimas de la caza furtiva en África. Las autoridades aduaneras de Hong Kong anunciaron este jueves que han confiscado el mayor alijo de marfil en la isla en tres décadas, tras el hallazgo de 7,2 toneladas de colmillos con un valor en el mercado negro de 72 millones de dólares (unos 63 millones de euros o casi 220 mil millones de pesos colombianos). El cargamento, escondido en un contenedor de 12 metros bajo cajas de pescado congelado proveniente de Malasia, fue confiscado el martes durante un control rutinario en el puerto de Hong Kong, confirmaron hoy los responsables aduaneros de la isla en rueda de prensa. Los agentes arrestaron a un hombre y a dos mujeres, empleados de una compañía comercial hongkonesa que, de ser culpables, podrían enfrentarse a una multa de 5 millones de dólares (unos 4,5 millones de euros) y una pena de prisión de hasta siete años. Según el responsable para Hong Kong de la organización internacional animalista WildAid, Alex Hofford, los documentos hallados junto al alijo marcaban la isla como el destino final de la mercancía. WildAid, que tiene como objetivo eliminar el comercio ilegal de fauna y vida silvestre, asegura que Hong Kong figura entre los mayores mercados minorista mundial de marfil y estima que el 90 por ciento de todo el marfil que llega a China lo hace a través de la isla. Según datos gubernamentales del pasado año, en Hong Kong había unos 100 kilos de marfil listos para la venta de forma legal a un precio medio aproximado de 1.000 dólares (unos 880 euros) por kilo. Siguiendo el ejemplo de China, que tiene previsto ilegalizar este negocio a finales de año, en enero de 2016 el Gobierno hongkonés puso en marcha un plan para abolir por completo el comercio de colmillos de elefante en la excolonia británica, que el pasado junio llegó hasta el Parlamento para ser debatida. En septiembre de 2015, el presidente chino, Xi Jinping, acordó con su entonces homólogo estadounidense, Barack Obama, luchar contra este tipo de comercio en ambas naciones, consideradas históricamente las mayores demandantes de colmillos del mundo. El primer acuerdo internacional que entró en vigor en 1990 para prohibir el comercio mundial de colmillo de elefante africano llegó a reducir el tráfico a índices históricos. Sin embargo, la bonanza económica de China de los últimos años y la normativa que permite la comercialización de marfil obtenido de animales muertos antes de 1990, elevaron el papel de Hong Kong en este mercado. WildAid Hong Kong calcula que la población de elefante africano se habría reducido en cerca de un 58 por ciento en los últimos 40 años, ya que un promedio de 33.000 elefantes al año son víctimas de la caza furtiva en África.
La «histórica» prohibición del comercio de marfil en China que puede salvar a los elefantes
China anunció la prohibición de todas las actividades de comercio y procesamiento de marfil. La medida terminará de implementarse hasta finales de 2017. Los grupos de conservación y activistas ambientales consideran la decisión como «histórica» y «todo un cambio» para el futuro de los elefantes. La medida sigue la última resolución de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas en Sudáfrica en octubre. China tiene el mayor mercado de marfil en el mundo. Algunas estimaciones sugieren que el 70% del comercio mundial termina allí. El marfil puede alcanzar los US$1.100 dólares por kilo en China. El procesamiento comercial y la venta de marfil se detendrá el 31 de marzo, y todos los comerciantes registrados se tendrán que retirar gradualmente. De esta forma el mercado de marfil desaparecerá a finales del siguiente año. El grupo conservacionista WWF dio la bienvenida a la noticia, calificándolo de «anuncio histórico». «El fin del mercado legal de marfil primario del mundo es un importante impulso a los esfuerzos internacionales para hacer frente a la crisis por la caza furtiva de elefantes en África». Elly Pepper, subdirectora de comercio de vida silvestre del Consejo de Defensa de Recursos Naturales, una organización sin fines de lucro de Estados Unidos, elogió a China por su «gran liderazgo» en el tema. «Establecer un calendario tan agresivo para cerrar, de una vez por todas, el mayor mercado interno de marfil en el mundo es globalmente significativo», afirmó. «Es todo un cambio y podría ser el punto de inflexión crucial que saque a los elefantes del límite de la extinción», añadió Pepper. Mientras que el mercado internacional del marfil se ha cerrado desde 1989, los mercados internos legales han continuado en muchos países alrededor del mundo. El aumento en la matanza de elefantes en los últimos siete años en África ocasionó que la población de este animal se reduzca en un tercio, de acuerdo con el último censo de elefantes. En octubre, China sorprendió a más de uno en la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas en Sudáfrica al apoyar la prohibición total del comercio de marfil con mucha firmeza.