¿Qué es la Enmienda Hyde, cuál es su impacto sobre el aborto y por qué Biden ha cambiado de opinión sobre ella?
Fue aprobada en el año 1976, tres años después de Roe vs. Wade, la decisión de la Corte Suprema que legalizó el aborto, y básicamente prohíbe que se utilicen fondos federales para abortos. Las recientes leyes que buscan restringir de forma radical la interrupción del embarazo y la campaña por las elecciones de 2020, han vuelto a ponerla en el centro del debate.
La posición del candidato a las primarias demócratas Joe Biden dio un giro inesperado este jueves al declarar públicamente que ahora apoya la eliminación de la Enmienda Hyde, apenas un día después de que su campaña ratificara que el exvicepresidente seguía apoyando esta disposición que prohíbe financiar el aborto con fondos federales, lo que trajo una fuerte ola de críticas.
La enmienda Hyde fue presentada por el congresista republicano Henry Hyde en el año 1976 como proyecto de ley de financiación del gobierno para el siguiente año. En el texto original, Hyde escribió que “ninguno de los fondos se utilizarían para la realización de abortos, excepto cuando la continuidad del embarazo ponga en peligro la vida de la madre”. Con ello, limitaba toda subvención federal a los abortos solicitados por las pacientes de Medicaid, el programa a través del cual las personas de menos ingresos reciben servicios de salud.
Desde entonces, la Enmienda se ha renovado cada año, con pequeños cambios bajo la presidencia de Clinton, cuando se lograron introducir las excepciones en casos de violación o incesto. Sin embargo, médicos y otros defensores del acceso a abortos seguros aseguran que dichos cambios son mínimos y que la Enmienda afecta directamente a las personas más pobres, y específicamente a las mujeres de color, que no tienen otra opción para pagar un aborto con sus propios recursos.
¿A quién afecta?
El precio promedio del procedimiento antes de las 13 semanas ronda los $500, una cifra que muchas personas que desean interrumpir un embarazo no pueden costear. A partir de las 13 semanas de gestación, los abortos se encarecen aún más.
Según datos de la KFF, 1 de cada 5 mujeres en edad reproductiva en Estados Unidos está inscrita en Medicaid y en 2014 el 75% de los abortos se realizaron a pacientes de bajos ingresos, de las cuales el 64% eran negras o latinas. En la mayoría de los casos, se trata de mujeres jóvenes y adolescentes, que tienen menos posibilidades de tener una fuente segura de ingresos.
La disposición prohíbe a Medicaid y otros programas federales cubrir los gastos de otros abortos que no entren dentro de las tres excepciones. Aunque ha sido muy criticada y cuestionada ante los tribunales por diferentes organizaciones como Planned Parenthood –para quienes se trata de un asunto de disparidad económica y justicia racial– en 1980 la Corte Suprema confirmó su carácter constitucional.
Los cambios de opinión
Si bien la derogación de la Enmienda Hyde forma parte de los objetivos de la plataforma demócrata desde 2016, Biden se había pronunciado a favor de mantenerla, contrario a muchos compañeros de partido y en supuesta defensa de su fe católica.
El pasado 8 de mayo la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) publicó un tuit con un video en el que una de sus activistas le pregunta al candidato si se comprometería a abolir la Enmienda Hyde, que hiere especialmente a las mujeres de color, a lo que Biden respondió: “Ahora mismo tiene que eliminarse, no puede permanecer”.
Estas declaraciones del expresidente sorprendieron a muchos, pero las críticas y presiones de sus compañeros de partido no se hicieron esperar cuando este miércoles el equipo de campaña del candidato, a raíz del video publicado por ACLU, declaró que Biden seguía apoyando la enmienda.
Los cambios de opiniones continuaron cuando más de 24 horas después, en un evento del Comité Nacional Demócrata, Joe Biden declaró que finalmente sí, le retiraba el apoyo a la Enmienda Hyde. «Sí creo que la atención médica es un derecho, como lo creo, ya no puedo apoyar una enmienda que hace que ese derecho dependa del código postal de alguien», declaró en el evento, que tuvo lugar en la noche de este jueves en Atlanta.
Biden justifica su cambio de postura con el eminente peligro de iniciativas republicanas y grupos a favor de restringir el aborto por imponer leyes extremas y coartar libertades y derechos constitucionales, como los defendidos por Roe vs. Wade, la decisión judicial que legalizó el derecho de las mujeres a decidir sobre sus cuerpos y solicitar un aborto si así lo deciden.
Para otros lo que está detrás de su cambio de opinión son las fuertes presiones y críticas por parte de los otros candidatos al trono demócrata para las elecciones de 2020, así como de activistas y plataformas de potenciales votantes.